Las pulgas pueden llegar a ser algo muy molesto si se instalan en casa y si nuestro perro las tiene, porque pueden llegar a reproducirse realmente rápido. En la primavera y verano es cuando hay más pulgas, y por eso debemos estar atentos, anticiparnos y saber reconocer cuándo nuestro perro tiene pulgas, pero también conocer cómo son las picaduras de pulgas para acabar con este problema.
Son muchos los dueños que tienen perros con pulgas en casa y no se percatan de ello. Es importante conocer a fondo este tema para evitar crear una invasión de pulgas y también para evitar que le piquen al perro y le causen daños en la piel, ya que pueden llegar a ser muy molestas.
Cómo reconocer las picaduras de pulgas
Las picaduras de pulgas son muy características, porque son puntos rojos y pequeños que suelen dejar como un camino, ya que van picando en líneas. En el perro son más difíciles de ver debido al pelaje, sobre todo si el pelo de nuestro perro es muy espeso, como el de los nórdicos, en los que nos es difícil ver la piel. Para verlas debemos revisar bien al perro. Cuando veamos estas picaduras, notaremos que tienen como un pequeño bulto, no son lisas, como pueden ser las picaduras de los mosquitos.
Cómo saber si el perro tiene pulgas
No solo por las picaduras, que en realidad pocas veces vemos, sabremos que el perro tiene pulgas. Estas son fáciles de ver en perros de colores claros, ya que son negras, pero en perros de pelaje oscuro tendremos que ponerle más empeño. De todas maneras, suelen ir dejando sus excrementos en el pelaje del perro, por lo que si hay muchas pulgas verás todas estas motas negras en el pelo, como suciedad. Las pulgas son pequeñas y alargadas, se mueven muy rápido y saltan muchísimo. De hecho, por propia experiencia os decimos que si saltan y las perdéis de vista es difícil volver a encontrarlas. Y son duras, muy duras, no se pueden matar tan fácilmente como a un mosquito, por lo que es mejor usar otros métodos. Además, se reproducen tan rápido que puede que el perro ya tenga muchos huevos incubándose para cuando matemos las que veamos.
Otro de los claros síntomas que podemos ver en el perro cuando tiene pulgas es que se rasca mucho. Antes de verlas fácilmente o de ver sus picaduras, notaremos que el perro se rasca de una forma constante. Es entonces cuando debemos buscar las pulgas o cualquier problema en la piel y el pelaje.
Alergia a las pulgas
Uno de los principales problemas que las pulgas pueden darle al perro es que tenga dermatitis, una alergia a las picaduras de este parásito. Las picaduras se pondrán más rojas, tendrán mucho picor y pueden llegar a tener grandes rojeces en la piel, incluso con caída del cabello y escamas. Por eso hay que detectarlas antes y acabar con ellas. Para saber más sobre este problema, que afecta solo a algunos perros, podéis buscar información sobre la DAP o Dermatitis Alérgica por Pulgas en perros.
Cómo deshacerse de las pulgas
Cuando el perro ya cuenta con muchas pulgas lo mejor que podemos hacer es acabar con las pulgas por partida doble. Por un lado es bueno hacerse con un spray anti pulgas para bañarlo, aplicando el spray durante el baño en las zonas en las que veamos pulgas. Hay que evitar que el perro pueda lamer esas zonas, por lo que es mejor hacer esto entre varias personas si el perro es inquieto. Lavaremos bien hasta ver cómo han caído la gran mayoría de las pulgas. Esto acabará con las pulgas existentes y los huevos.
No obstante, debemos protegerlo para que no vuelva a coger más pulgas en el paseo por el campo. Para ello tendremos que ponerle un collar antipulgas o la pipeta anti parásitos. Con esto lo habremos protegido para la temporada. Hay que recordar que esta pipeta protege durante unos meses y que hay que volver a ponerla para que no pierda efectividad.
El artículo Picaduras de pulgas, cómo conocerlas y combatirlas ha sido originalmente publicado en Mundo Perros.
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